
Los crisoles de grafito son reconocidos por su excepcional conductividad térmica y resistencia a altas temperaturas. Su bajo coeficiente de expansión térmica les confiere resistencia al calentamiento y enfriamiento rápidos, lo que los hace ideales para aplicaciones exigentes. Además, su robusta resistencia a ácidos corrosivos y soluciones alcalinas, junto con su excelente estabilidad química, los distingue en diversas industrias.
Sin embargo, el uso de crisoles de grafito exige una atención meticulosa a las directrices específicas para garantizar su longevidad y un rendimiento óptimo. A continuación, se presentan algunos puntos clave a considerar:
Precauciones previas al uso:
Inspección y preparación del material: Inspeccione minuciosamente los materiales que se colocarán en el crisol para detectar cualquier elemento explosivo. Al añadir materiales, asegúrese de que estén precalentados y adecuadamente secos. Al introducir crisoles de grafito en el proceso, la velocidad de inserción debe ser gradual.
Manipulación y transporte: Utilice herramientas especializadas para transportar los crisoles, evitando que rueden directamente sobre el suelo. Manéjelos con cuidado durante el transporte para evitar dañar el vidriado, lo que podría comprometer su vida útil.
Entorno: Mantenga el entorno del horno seco y evite la acumulación de agua. No apile objetos ajenos cerca de los crisoles de grafito para evitar interacciones no deseadas.
Instalación y fijación del crisol:
Para hornos de gas o petróleo: Coloque el crisol sobre la base, dejando un espacio de expansión entre la parte superior y la pared del horno. Utilice materiales como bloques de madera o cartón duro para fijarlo. Ajuste la posición del quemador y la boquilla para asegurar que la llama se dirija a la cámara de combustión, no directamente al fondo del crisol.
Para hornos rotatorios: Utilice ladrillos de soporte a ambos lados del pico de vertido del crisol para asegurarlo, sin apretarlo demasiado. Inserte materiales como cartón, de unos 3-4 mm de grosor, entre los ladrillos de soporte y el crisol para permitir la preexpansión.
Para hornos eléctricos: Coloque el crisol en la parte central del horno de resistencia, con su base ligeramente por encima de la fila inferior de elementos calefactores. Selle el espacio entre la parte superior del crisol y el borde del horno con material aislante.
Para hornos de inducción: asegúrese de que el crisol esté centrado dentro de la bobina de inducción para evitar sobrecalentamiento y agrietamiento localizados.
El cumplimiento de estas pautas garantiza un uso seguro y eficiente de los crisoles de grafito, mejorando su longevidad y eficacia general en aplicaciones de alta temperatura.
Para obtener instrucciones y asistencia más detalladas, se recomienda a los usuarios consultar las pautas del fabricante y consultar con expertos de la industria.
Hora de publicación: 14 de agosto de 2023